Por Ovaldo Cuéllar Sabi | Columnista, activista animalista y periodista
NEIVA, HUILA — En un país donde el liderazgo suele medirse por discursos y promesas, Deiby Martínez Cortés emerge como un caso excepcional: un hombre que convierte palabras en hechos, y hechos en legado. Su historia no es solo la de un político, sino la de un estratega, un humanista y un defensor incansable de los más vulnerables: los animales, los ancianos y las comunidades olvidadas.
De la radio comunitaria a las cumbres mundiales: Un viaje sin atajos
A los 17 años, cuando muchos adolescentes piensan en fiestas, Deiby fundó Neiva Stereo y La Nueve Stereo, radios comunitarias que se convirtieron en semillero de periodistas y altavoz de causas sociales. Hoy, décadas después, su voz resuena no solo en el Huila, sino en foros globales como la Cumbre Mundial del Medio Ambiente en Madrid o las 17 cumbres de marketing político donde ha sido invitado.
Pero lo que define a Deiby no son los micrófonos que ha conquistado, sino los problemas que ha resuelto. Como dos veces presidente del Concejo de Neiva, impulsó políticas transparentes que revolucionaron la gestión pública local. Como juez de paz, demostró que la justicia puede ser ágil y humana. Y como director de Protección Canina Mundial, logró en 2025 un hito: un fallo histórico contra una multinacional de alimentos para mascotas, protegiendo a millones de animales y consumidores.
El activista que enfrenta a las multinacionales (y gana)
Aquí hay un dato que duele: el 68% de los alimentos para mascotas en Colombia incumplen estándares de calidad. Deiby no solo lo denunció, sino que lo demostró con cinco artículos técnicos sobre micotoxinas y contaminación, documentos que hoy son referencia para laboratorios y expertos. «No basta con rescatar perros de la calle —me dijo en entrevista—; hay que atacar las raíces del maltrato: la negligencia empresarial y la indiferencia social».
Su combate no es teórico. A través de su ONG Protección Canina Mundial, ha liderado decenas de campañas de rescate animal y acciones legales pioneras contra el maltrato, demostrando que la defensa de los derechos animales requiere tanto de corazón como de estrategia. Su lucha más emblemática fue la tutela contra una multinacional en 2025, un caso que sentó jurisprudencia histórica en Colombia y reveló su fórmula secreta: mezclar rigor técnico (apoyado en sus artículos especializados sobre salud canina), valentía jurídica y movilización ciudadana para desafiar a gigantes corporativos.
El influencer político que no sigue algoritmos, sino principios
En redes sociales, Deiby rompe estereotipos. Con 1.2 millones de seguidores en Facebook, no publica selfies vacías, sino campañas virales que salvan vidas: desde adopciones de perros ancianos hasta recaudaciones para adultos mayores abandonados. «La política se hace en las calles, no en escritorios —afirma—. Y si las redes son nuestras nuevas plazas públicas, usémoslas para educar, no para dividir».
Su impacto digital explica por qué ciudades como Barcelona, Orlando y Lima lo han invitado a hablar de marketing político. Pero él insiste: «El mejor ‘trending topic’ es ver a un abuelo recuperar la sonrisa, o a un perro rescatado encontrar hogar».
¿Por qué Deiby Martínez importa hoy?
En una Colombia polarizada, su trayectoria ofrece un modelo distinto:
- Liderazgo sin etiquetas: Es administrador público, pero también periodista; animalista, pero con conocimientos técnicos; localista neivano, pero con mirada global.
- Resultados, no retórica: Ha presentado proyectos de acuerdo, ganado demandas, formado líderes y alimentado ancianos. Todo documentado.
- Ética como bandera: En 10 años al frente de la Fundación Hechos de Paz, ningún escándalo de corrupción. Solo obras.
La pregunta que queda es si Colombia está lista para líderes como él: profesionales que prefieren el trabajo callado a los titulares fáciles, y que entienden que defender un perro callejero o a un adulto mayor no es «activismo blando», sino un acto de justicia.
































